con Frisos de PVC, todo son ventajas.

Muchas son las ventajas de los frisos de PVC pero las más destacadas son el aislamiento térmico y acústico, su fácil limpieza, la gran calidad, diversidad de modelos y colores, ocultan desperfectos de las estancias y su coste es muy económico.

Son ideales para revestir espacios que soporten humedad habitualmente como los baños o cocinas. Se pueden instalar en paredes, techos y bajocubiertas y es la opción perfecta para rehabilitar o hacer habitables buhardillas, sótanos o trasteros.

Estos frisos son de gran calidad y han conseguido ser imitaciones idénticas a la madera. Mismo acabado e igual calidad a menor precio.

En paredes los frisos se pueden encontrar a media altura, dejando parte de pared al descubierto, o de altura completa.

Su limpieza no es un problema ya que simplemente pasando un paño o bayeta humedecida con un detergente de hogar común quedan relucientes.

A diferencia con los frisos de madera o MDF, cuentan con todo tipo de perfiles adecuados a nuestras necesidades. Entre los cuales encontramos perfiles de multifunción, unión, extremidad, extremidad clip o cornisa. Con ellos podremos recubrir cualquier tipo de superficie tenga la forma que tenga.

La instalación de los frisos de PVC es sencilla y rápida, todas las cajas de este material traen instrucciones precisas y fáciles de comprender. Sólo se necesita colocar un aislante en la zona a revestir y después poner encima las laminas de friso con cola adecuada, grapas o tornillos.

El acabado, aunque casero, es un trabajo decorativo que nada tiene que envidiar al de un profesional.

Atrévete y dale una nueva imagen a tus “desconchones”.

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